La adaptación cinematográfica de "Borderlands" se enfrenta a una semana de estreno turbulenta, plagada de una recepción crítica abrumadoramente negativa y una disputa crediticia. La película actualmente cuenta con una pésima calificación del 6% en Rotten Tomatoes, según 49 críticas. Los críticos destacados han sido mordaces, con descripciones que van desde "tonterías locas" hasta una película que fracasa en términos de humor, a pesar de algunos elementos de diseño positivos. Si bien la acción explosiva y el humor crudo de la película han encontrado cierto favor entre un segmento de la audiencia (lo que resultó en una puntuación de audiencia del 49%), el consenso crítico general es decididamente negativo. Muchos de los primeros espectadores se hicieron eco de los sentimientos de los críticos y describieron la película como "sin vida", "terrible" y "sin inspiración".
A los problemas de la película se suma una controversia reciente en torno al trabajo no acreditado. Robbie Reid, un montador independiente que trabajó en el personaje de Claptrap, reveló públicamente en X (anteriormente Twitter) que ni él ni el modelador del personaje recibieron crédito en pantalla. Reid expresó su decepción, particularmente dado su historial crediticio previamente consistente, y atribuyó el descuido a la posibilidad de abandonar el estudio en 2021. Si bien reconoció la desafortunada prevalencia de tales problemas dentro de la industria, expresó su esperanza de que la situación pueda contribuir a un cambio positivo con respecto a la acreditación de artistas. prácticas. Los problemas de la película "Borderlands" se extienden más allá de las malas críticas, destacando los desafíos actuales relacionados con el trato justo y el reconocimiento dentro de la industria cinematográfica.